Traducido por Kristina Cordero
This is a summary of news that appeared in English this week in The East Hampton Star.
Durante las últimas dos semanas el número total de casos de Covid-19 en el South Fork se ha mantenido estable, y Stony Brook Southampton Hospital está dando de alta a tanta gente como la que está admitiendo durante este mismo período. Sin embargo, no ha habido una disminución en el número de nuevos casos reportados.
“A juzgar por lo que hemos visto, la enfermedad está todavía circulando en la comunidad,” dijo Robert Chaloner, el jefe administrativo de la clínica el lunes pasado. “Claramente, la gente todavía se está enfermando”.
Para el viernes pasado en la mañana había 33.928 casos confirmados de Covid-19 en el condado: 645 en el pueblo de Southampton, 177 en el pueblo de East Hampton, 425 en Riverhead, 311 en Southold, y 6 en Shelter Island. Dentro de ese total existen miles de casos no contabilizados, eso sí, por la falta de direcciones exactas confirmadas.
Ya que el plazo de la orden ejecutiva “New York State on PAUSE” está a punto de vencer el 15 de mayo, el gobernador del estado de Nueva York, Andrew M. Cuomo, ha esbozado un plan regional, ejecutable en fases a partir del domingo, para reabrir partes del Estado de Nueva York “en el momento indicado”. Este plan privilegiaría el reinicio de operaciones para los sectores de la construcción y la manufactura en zonas que han experimentado una baja sostenida durante 14 días en la tasa de hospitalizaciones. Hasta el momento el condado de Suffolk no cumple con ese criterio.
En referencia a la orden PAUSE en el estado, el lunes pasado el gobernador dijo “la voy a extender en muchas partes del estado, pero en ciertas zonas del estado, algunos plantearían que debemos desactivar la orden el 15 de mayo”. Pero el martes pasado anunció que si los hospitales de una región superan el 70% de su capacidad, o si la tasa de contagio supera el 1.1, no será posible flexibilizar la orden PAUSE.
Una segunda fase del plan del gobernador propone la reapertura de algunas industrias “basada en prioridad y nivel de riesgo”, con preferencia para aquellos negocios considerados “más esenciales” y con un riesgo de contagio bajo para empleados y clientes. A este grupo le seguirán aquellas empresas consideradas “menos esenciales” o aquellas cuyas actividades presentan mayor riesgo de contagio.
Habrá un período de espera de dos semanas entre cada fase, durante el cual se medirán los efectos del reinicio de actividades, para asegurar que no haya un incremento en las infecciones y las hospitalizaciones como resultado de la nueva medida. En el South Fork y a lo largo de Long Island, es poco probable que el reinicio de actividades ocurra al mismo ritmo que en regiones del norte del estado. El martes pasado el Ejecutivo del Condado de Suffolk, Steve Bellone, dijo que el condado “se está acercando cada vez más” a las directrices del gobernador, pero “con toda medida que adoptemos, debemos preguntarnos si contribuye al objetivo de proteger la salud pública y reactivar la economía”.
Subrayó que para él, proteger la salud pública es más importante que cualquier consideración económica. El Supervisor del pueblo de East Hampton, Peter Van Scoyoc, avisó “debemos tener mucho cuidado para evitar una situación en que el segundo brote sea peor que el primero”, hablando de la infección de Covid-19. “A estas alturas”, declaró, “Nadie quiere retrocedamos”. Aún así, las palabras del gobernador esta semana ofrecieron la señal más concreta, aunque condicional, de la llegada de una “nueva normalidad” gracias al declive en la ola de contagios. “Queremos reabrir”, dijo el martes pasado, “pero queremos hacerlo sin contagiar a más personas, y sin sobrecargar al sistema de salud”.
Se lanza petición para línea telefónica para la crisis de alimentación en el condado
Abena Asare, profesor asociado de historia africana contemporánea en Stony Brook University, junto con la Organización Latino-Americana de Eastern Long Island, han iniciado una petición para una línea telefónica para responder a la crisis de alimentación que existe en el condado de Suffolk.
Aunque las organizaciones de ayuda alimenticia han duplicado sus esfuerzos durante Covid-19, OLA ha detectado sectores con severos problemas de movilidad que necesitan urgentemente resolver sus necesidades de alimentación. En esta petición para abrir una línea telefónica para responder a esta emergencia, se explica que Covid-19 ha creado nuevas dificultades para comunidades ya vulnerables en materia de servicios sociales, trabajo y salud.
OLA busca apoyar a la comunidad en su intento de atender a las necesidades básicas de quienes necesitan ayuda. La línea telefónica tomaría en consideración circunstancias intervinientes como condiciones de salud, embarazo, transporte, distancia de supermercados, y restricciones federales sobre el uso de beneficios SNAP para costos de despacho y discapacidad.
La petición está disponible en change.org y se puede buscar con las palabras clave “Suffolk County Hotline” en el buscador. Explica la naturaleza del plan, que pide que el condado considere opciones de idioma, almacenaje, equipamiento protector, y confidencialidad a la hora de diseñar un sistema que priorice la seguridad de los voluntarios y apoye la ayuda de las
despensas de comida existentes.
Restricciones de estacionamiento en las playas, implementadas anticipadamente, resultaron en
177 multas
Este sábado pasado, el departamento de policía del pueblo de East Hampton y sus oficiales dedicados a velar por el cumplimiento del código del pueblo, emitió 177 multas por infracciones relacionadas al estacionamiento de vehículos, un día después de que entraran en vigor las restricciones de estacionamiento de la temporada de verano.
La implementación anticipada de las reglas de estacionamiento en las playas es otra medida que busca limitar la acumulación de gente en los lugares públicos y asegurar el cumplimiento del mandato de distanciamiento social de seis pies entre cada persona, para evitar la transmisión del Covid-19.
El pueblo de East Hampton también cerró la sección abierta de estacionamiento Kirk Park en Montauk, limitando el estacionamiento a los residentes y limitando el estacionamiento en otras zonas de Montauk cerca de los accesos a playas y parques. La semana pasada el municipio también anunció la suspensión, hasta próximo aviso, de la venta de credenciales de
estacionamiento para no-residentes. También anunció que las credenciales vencidas de los no- residentes no serán renovadas automáticamente, como se está haciendo para otros permisos municipales.
Tras un monitoreo más intenso en los parques estatales en Montauk, la policía y los oficiales de los parques acabaron cerrando los parques cuando llegaron a su límite de capacidad.
‘No hay planes’ para una graduación virtual de la escuela secundaria de East Hampton
La escuela está cerrada hasta junio, dijo el gobernador del estado de Nueva York, Andrew M. Cuomo, el viernes.
En casi todas partes, los alumnos de ultimo año de la escuela secundaria lamentan la pérdida de un año especial. Toda una serie de ritos y momentos memorables están siendo reemplazados por clases online, reuniones por Zoom y encuentros en FaceTime, si es que no han sido simplemente abandonados. El último partido. La última prueba. Los viajes de vacaciones de primavera. Las ceremonias de las sociedades de honor. El banquete o la fiesta de fin de año. La firma del anuario. La graduación.
“No hay planes para realizar una ceremonia virtual. Estoy haciendo todo lo posible para evitar ese tipo de evento”, dijo esta semana Adam Fine, el director de East Hampton High School. Fine dice estar trabajando con las autoridades locales para lograr algo “apropiado y permitido. Diseñaremos la ceremonia según esas directrices”.
Sus pares en otros distritos de Long Island esperan no tener que celebrar estas ceremonias de manera remota, pero todos están evaluando sus opciones, entre ellas la de posponerlas hasta agosto. Jeff Nichols, director de Pierson High School y superintendente interino de escuelas de Sag Harbor, dijo que están “evaluando diferentes formatos” y monitoreando las noticias desde el Estado de Nueva York. Esta semana Robert Hauser, el superintendente de escuelas de Bridgehampton, y Michael Miller, el director de la escuela de Bridgehampton, se reunieron remotamente con una empresa que gestiona ceremonias de graduación virtuales.
“Parece haber llegado en un momento muy poco oportuno”, dijo del brote de coronavirus Wells Woolcott, el alumno de último año en East Hampton con el segundo mejor promedio de su generación. “Casi todos mis compañeros y compañeras coinciden en eso. Llegó justo en un momento en que las notas importan poco, y lo que sí importa es celebrar y compartir con una comunidad que tal vez no vuelvas a ver en 10 años o más. Lo más impactante ha sido la sensación de estar en un momento muy importante para ver a los amigos, para crear recuerdos, y de repente perdimos eso. Facetime y Zoom no logran reemplazar el proceso de hacer recuerdos en persona”.